jueves, 25 de diciembre de 2014

Tarde de diciembre


Son tiempos de cambios los que vivimos, 
son noches tranquilas que a veces traen incertidumbre. 
En el sur los días de diciembre son largos, 
cada tanto acompaño el café con un par de lagrimas.
Talves nos volvimos locos al huir, 
no tenemos nada, no somos nadie
llegamos al numero 0.
Amarilla la tarde a las 8 de la noche
agradezco la experiencia del desapego.
Empezamos una nueva historia.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Cetaceo

He soñado que nado con ballenas
por allá un octubre frío me saluda
el canto profundo vibra
vuelo en un vacío
soy una hojarasca en un universo
y el susurro atraviesa mi cuerpo
como el viento en las plumas de un ave
Estoy enamorada de una ballena
recita poesía para mi
el ventarron de la tarde en Maracaibo
que atraviesa la ventana entreabierta
una serenata cetacea del sur.

Bitácora Nomada I.

La retorica de la huida se ha quedado muda
No hay consuelo en la esperanza
Cuando no queda luz, ni agua.
Voces silenciadas en las quejas que ya no existen
Sumisión sin pan de cada día,
Contengo las ganas de llorar en el trabajo duro
En el camino largo, las calles rotas
En el supermercado vacío de almas
En los libros que dejaré atrás.
Era de ensueño viajar por el mundo
Suovenirs de vuelta al hogar
El romance de una vida nómada
Distintas latitudes, primaveras, inviernos.
Era el idilio de una casita en las montañas andinas
Un sembradío y un gran taller
Ahora los sueños deberán ir guardados en la cartera
Como la estampita de la buenaventura
Que acompañe el viaje obligado.

sábado, 26 de abril de 2014

Vendrán tiempos mejores



Han muerto García Marquez y Mandela, los grandes se van desmaterializando. Se dice que los buenos tiempos han pasado, que fuimos felices y solo queda el desgaste, el olvido, cuando mucho el deja vu; lloramos el camino y despedimos con flores a los que se nos fueron sin vestigios de un adios. Mas aún, aceptar que las mejores cosechas quedaron en el pasado, que esta tierra ya no puede germinar genialidad, eso si sería pensar en el final de los tiempos y resignarnos al conformismo de una masa que hace lo que puede sin esfuerzos, sin méritos y sin nada extraordinario que contar. Es posible que eso sea cierto? yo confío en las probabilidades y es que estadisticamente es imposible que no existan jóvenes, incluso niños compilando esencia de grandeza, gestando un big bang intelectual, entre tanto caos y desperdicio. Con los ojos cerrados y las manos en el fuego se que vendrán tiempos mejores.




Encierro nómada.


El arlequín del tiempo y la escasez de monedas
hibernan los nómadas que somos
los viajes parecen algo lejano 
los amigos se sienten distantes
Brisa que me abandona con solo tocarme
tristeza que casi no recuerdo
la rutina se hace dulce por fermentación
y mi cuerpo extraña el olor de otras casas, otras calles
el sabor de otras aguas y otras flores
cargar las maletas con mapas imaginarios
y llenar de fotos el celular.
Quien viaja vive mas y estamos viviendo menos
se hace mas difícil usar los números 
y recorrer sin miedos ni hambre.