martes, 27 de marzo de 2012

Cubo


Filósofos del Zen al mejor estilo de un chofer de tráfico a hora pico
en la casi ciudad que me ha dado hogar una veintena.
En la calma sin tiempo saboreaba las ideas,
ahora no hay calma fuera de mi cubo de cemento apilado
solo aprendo de la tv, el internet y un par de libros,
el contacto humano ya muy poco me provee de aliento.
Me enamoro fácilmente del viento, de los rostros lejanos
y de la ficción mas vivida me enamoro
también huyo como deporte olímpico
y ya no he vuelto a llorar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario